Se trata de la
exposición de ciertos elementos que, por analogía, pueden
transferirse a otros contenidos o situaciones.
Los ejemplos facilitan la comprensión
de las informaciones y de los contenidos de aprendizaje, conocimientos,
ideas o procedimientos.
El abanico de objetivos que permiten
trabajar es muy amplio, pero normalmente por sí solos los ejemplos
no aseguran la consecución de ninguno de ellos. En este sentido,
se caracterizan porque actúan como complementos de otros recursos.