Concepto de arquitectura

Cualquier arquitectura permite integrar en un todo a un conjunto de sistemas que los componen. De este modo, una arquitectura tecnológica ha de permitir integrar un conjunto de sistemas (documentación, información y conocimiento) y herramientas (de generación, codificación, transferencia y aplicación) con el propósito de gestionar el conocimiento en la organización. Aquí es el propósito -la gestión del conocimiento- el que da sentido y significado a cada uno de los sistemas y herramientas. No son sus características técnicas, la mayoría de ellas también se utilizan para otros fines y en otros sistemas, sino su integración en esta arquitectura creada para gestionar el conocimiento.

Una arquitectura tecnológica de gestión del conocimiento supone la definición de un marco de referencia que refleje el modelo de empresa desde el punto de vista del conocimiento y su gestión.

Los objetivos básicos que hay que tener en cuenta a la hora de diseñar la arquitectura tecnológica son:

Material complementario
  • Estándares comunes
  • Lenguaje común
  • Dinamismo en la comunicación entre los usuarios
Bibliografía

Una ejemplo destacable de arquitectura tecnológica podría ser el que presentó Larry Kerschberg, el cual tiene presente la heterogeneidad de las fuentes de conocimiento y, para ello, integra en él diferentes componentes que permiten su presentación, gestión y estructuración.

Ejemplo

No obstante, este tipo de arquitecturas presenta algunas debilidades destacables. Por ello, es preciso incorporar dentro de la arquitectura los intereses de cada persona y relacionar a éstas para que "conversen" y se intercambien experiencias.


Este tipo de arquitecturas debe ser adaptada para apoyar el intercambio de información y conocimiento dentro de las comunidades o redes informales de la organización, enfatizando el concepto de distribución e la tarea de administrar la "base de datos de contenidos, permitiéndole a la red mantenerse actualizada y en movimiento.


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