Por experiencia sabemos que al iniciar un grupo o al incorporarse alguien nuevo se producen una serie de ajustes. Cada persona es diferente y estas diferencias se proyectan rápidamente en la dinámica del grupo. En las diferentes fases que atraviesa el grupo sus miembros también responden con su conducta a los cambios que se van produciendo. Para una buena comunicación grupal es importante saber analizar las situaciones que se producen y el tipo de ajustes que se muestran. Cuando mejor podamos identificar lo que sucede tanto a nivel del grupo como de cada componente mejor podemos intervenir y participar de forma constructiva y dinámica.
De forma un poco simplificada podemos describir las siguientes conductas de ajuste al grupo:
Agresión
Un ajuste común a la frustración es la agresión. Cuando las ideas de uno no son aceptadas o ésta percibe un rechazo por parte de las demás, su reacción puede ser la de dar golpes ciegamente, a veces con comentarios cínicos o con agresividad verbal.
Compensación
A veces es otra manera de enfrentarse a la frustración. Si se frustra en el logro de un objetivo dado, puede desviar sus energías a otro campo mediante la sustitución del objetivo. Si, como miembro del grupo, tiene dificultades en comunicarse en las exposiciones grupales, puede abstenerse de comentar durante la discusión, pero gastar una gran energía "torpedeando" la puesta en práctica de las acciones decididas. También puede manifestarse mediante desinterés y fastidio por lo que el grupo elabora.
Racionalización
Muchos se ajustan a la frustración del deseo mediante el proceso de racionalización. Si uno encuentra dificultades en el logro de un objetivo, puede inconscientemente explicar la situación y alejarse de ella, negándose a sí mismo que alguna vez deseaba lograrla. Por ejemplo la persona que pierde en la elección de un cargo en el seno de un grupo se dice a sí mismo que, después de todo, no es un cargo importante y que en realidad no hubiera tenido tiempo para desempeñarlo eficazmente aunque hubiera sido elegido. La racionalización, por lo general, tiene lugar en el nivel inconsciente.
Identificación
Es una forma de vivir a través de las vidas de otros, mediante participación supletoria en su logro exitoso, más bien que buscando satisfacciones en actividades desconocidas. Aquellos/as que se ajustan mediante identificación a menudo imitan el comportamiento y los maneramientos de la persona con la cual se identifican.
Idealización
Esta forma de ajuste está relacionada estrechamente con la identificación. Es el ajuste a sentimientos tales como los de la propia insuficiencia mediante la sobreestimación de sí mismo, exagerando sus aptitudes, sus logros y su importancia. También puede idealizar a otros individuos y sus triunfos. Un individuo idealiza cuando asigna un valor mayor a sus contribuciones al grupo que el valor que el grupo en conjunto le asignaría.
Desplazamiento
Ocurre cuando un individuo transfiere a una persona los sentimientos que tiene para con otra. A menudo acompaña la idealización. Si una persona idealiza a otra y ésta hace algo que no está aprobado por el idealizador, puede culpar él a otra persona. Una persona que acaba de tener un conflicto con su jefe, pero no le dice nada acerca de ello y en cambio al llegar a su casa descarga su fastidio sobre su mujer e hijos.
Proyección
Es cuando el individuo transfiere a otro sus propios sentimientos de insuficiencia o frustraciones. Por ejemplo, si una persona no ha tenido éxito en una de sus intervenciones puede proyectar la culpa sobre los otros porque no le escuchaban o no estaban atentos.
Conversión
Es la transferencia de energía después o durante una frustración de deseo hacia algún síntoma o enfermedad físicos. En los casos extremos los individuos pueden en realidad presentar síntomas de una dolencia física en este ajuste a la frustración de un deseo. Puede ocurrir después de una reunión difícil donde se han tenido que definir posiciones de los miembros del grupo, que a la reunión siguiente algunos no asistan alegando estar enfermos. En muchos casos los síntomas son reales.
Regresión
Es un proceso que permite retroceder de una situación compleja existente a otra más sencilla. Cuando un individuo encuentra una situación demasiado compleja, puede retroceder en su conducta a un enfoque menos maduro, con la esperanza de ser tratado a este nivel. Un ejemplo es el de llegar tarde a una reunión o hacer una intervención desafortunada y al momento adoptar una actitud infantil, esperando que la reacción sea menos intensa y benevolente acerca de nuestra conducta.
Negativismo
Es uno de los más comunes. Es el esquema de conducta en el cual el individuo frustrado responde a todas las alternativas subsiguientes de manera negativa. Los niños saben mucho de ello.
Fantasía
Se trata de involucrar la imaginación de situaciones en las que los objetivos de uno se logran cuando tiene lugar la frustración. El término para ello es el de "ensueño".
Muchas reacciones que se observan en las personas, pueden ser, al principio, difíciles de entender. Se tornan más comprensibles cuando se analizan en el esquema de la frustración del deseo y el ajuste a esta frustración. Lo aconsejable, también en esto, es el análisis racional de uno mismo y de sus acciones. Uno necesita pronosticar las frustraciones posibles de otros y conducirse uno mismo de manera que estas frustraciones. En un grupo maduro, los conductores pueden ayudar a los integrantes del mismo a entender sus frustraciones y los ajustes que hacen por causa de ellas. De otra manera, el grupo puede perder la mayor parte de su tiempo y energía procurando que sus miembros no sufran frustraciones, quedándole poco tiempo y energía para tomar decisiones y actuar productivamente.
Las conductas que las personas adoptan frente a las frustraciones no son necesariamente buenas o malas. Dado que los individuos viven en una sociedad organizada en la cual ciertas libertades para obrar sin preocuparse de los demás han sido abandonadas par el bien común, es inevitable que algunas tendencias y deseos se bloqueen. Las frustraciones son una parte intrínseca y normal de la interacción de los seres humanos. El conductor de un grupo que reconoce esto e intenta crear esquemas de interacción social dentro de su grupo, que reduzcan al mínimo las frustraciones, encontrará que la moral del grupo permanecerá alta y que el grupo se dirigirá más rápidamente hacia el logro de sus objetivos.
A medida que los integrantes se tornan más aptos para reconocer los factores que ocasionan los bloqueos o las frustraciones y los tipos de ajustes que se deben hacer en estas situaciones, pueden elegir racionalmente para efectuar aquellos ajustes que requieren el menor gasto de tiempo y energía emotiva. Esto conduce a una mayor motivación individual, mayor satisfacción personal con el grupo y sus actividades y mayor productividad grupal.