Cuando hablamos de comunicación a veces nos olvidamos de nuestra comunicación más próxima. Es decir las personas con las que tenemos una relación especial, sea personal o profesional. Lo que sucede es que estamos tan atareados y sometidos a numerosas presiones que no siempre acertamos en comunicar con aquellos/as que tienen un especial significado para nosotros/as.
Aunque pueda parecer una cosa obvia, hemos de organizar nuestros contactos y nuestras relaciones. En un mundo complejo, en el que vivimos a veces en otros lugares de los de procedencia, en que nuestro tiempo está cronometrado, es fácil encontrarnos SOLOS.
En el mundo actual nos vemos obligados a trabajar y vivir en ciudades, pueblos o países que no son los de nuestro origen. Cuando nos instalamos en otra ciudad la última cosa que nos preocupa es el crear una red de amigos o de conocidos.
También puede ocurrir en nuestros puntos de origen. Sin darnos cuenta nuestras relaciones se debilitan o desaparecen. La rutina, las apretadas agendas o el cansancio nos hacen olvidar el cuidar nuestras redes de contacto.
Es por ello que tratamos el tema de "networking" es decir como establecemos nuestras redes de contacto. Simples situaciones nos muestran que no es tan sencillo. ¿Con quien voy a desayunar hoy? ¿ A quienes vamos a encontrar este fin de semana? ¿Con quienes vamos a compartir nuestras vacaciones?... Sin olvidar que en nuestro mundo profesional es importante mantener contactos y establecer relaciones que nos pueden ser útiles tanto para compartir nuestras inquietudes profesionales como para posibles iniciativas empresariales.
Se trata de tomar el tema de nuestras relaciones como un tema importante que hay que gestionar. A modo de ejemplo, tratar de recordar cuantas veces nos hemos dicho: tengo que llamar a tal o cual, me gustaría desayunar con, hace tiempo que no sé nada de, etc.
Nuestras relaciones más o menos intensas son como las plantas, para mantenerlas vivas hay que cuidarlas. A menudo, nuestras agendas sobrecargada nos impiden cuidar de nuestras relaciones y amistades. De momento no pasa nada, pero con el paso del tiempo quizás lamentaremos el no haber cuidado nuestras relaciones.
Gestión de nuestro network
Estamos acostumbrados a gestionar proyectos, personal, compras, etc., así como no podemos ir de vacaciones sin una preparación previa. En el fondo gestionar nuestro network es casi lo mismo.
Se trata de fijarnos objetivos, elaborar un calendario y programar nuestras acciones.
Objetivos
Fijar objetivos en este caso significa el descubrir que es lo que queremos. Algunos ejemplos nos pueden ayudar:
Practicar deporte con alguien.
Tomar unas cervezas.
Organizar encuentros en nuestro hogar.
Compartir inquietudes intelectuales.
Reforzar vínculos profesionales.
Etc.
Calendario
Todo sucede en el tiempo. No basta con desear algo, hay que buscar un lugar en el calendario. Si queremos organizar una velada en nuestro hogar con compañeros/as de nuestra profesión, hay que fijar fechas, hay que consultar agendas....
Programar
Es consecuencia del calendario. Una vez tenemos una fecha hay que preparar, invitar, confirmar y por supuesto organizar el evento que deseamos sea exitoso.
Algunos consejos
Una vez hemos elaborado la lista de personas que deseamos formen parte de nuestra red de contactos, podemos definir prioridades, por ejemplo en color rojo las personas que queremos encontrar cada semana, en verde cada mes y amarillo al menos cada tres meses.
En nuestra agenda de contactos podemos señalar las fechas de nuestros encuentros, con lo cual podemos evaluar si alcanzamos los objetivos que nos hemos propuesto.
Cada semana al programar nuestra agenda profesional, tener en cuenta los contactos que deseamos establecer.