En sus orígenes Menfis era llamada Ineb-hedy "el muro blanco", en referencia al muro que rodeaba la ciudad. Según la tradición, la ciudad de Menfis fue fundada alrededor del 3100 a.n.e., conmemorando la unificación del Alto y el Bajo Egipto y convirtiéndose a partir de entonces en capital del Egipto unificado. La región en la que está situada Menfis recibía el nombre peseshet-tauy "la Balanza de las Dos tierras". El emplazamiento de la ciudad habría sido escogido principalmente por su excepcional situación geográfica, que le permitía controlar todas las rutas de entrada hacia el desierto oriental, el Levante, el mar Rojo y el desierto sahariano. Los faraones tinitas (III dinastía) la convirtieron en la capital administrativa del país y fijaron en ella su residencia. Menfis siguió siendo la capital de Egipto durante todo el Reino Antiguo.