Una base de datos es costosa y difícil de crear. El tiempo que comporta la preparación del software, la necesidad de contar con un experto para que diseñe la base de datos y el coste para mantenerla son los requerimientos necesarios para incluir una base de datos en nuestra empresa.
Para generar una base de datos se establece un proceso o metodología que se inicia con la visión del mundo exterior, en concreto, de la parte que nos interesa representar en datos.
En este proceso se tiene que aprender, comprender y conceptualizar dicho mundo exterior, y transformarlo en un conjunto de ideas y definiciones que supongan una imagen fiel del comportamiento del mundo real. Dicho proceso de abstracción genera lo que conocemos como el modelo conceptual.
Este modelo conceptual se transforma en una descripción de datos, atributos y relaciones denominada esquema conceptual de datos o esquema relacional (en referencia a la estructura de una base de datos relacional).
Por último, este modelo relacional se traduce en estructuras almacenables en soportes físicos, llamado modelo físico.
La correcta definición del modelo conceptual de la base de datos es imprescindible para garantizar su correcta generación. A continuación se enumeran los principales componentes y elementos de una metodología para definir un modelo conceptual de datos: entidades, atributos, claves y relaciones.