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Consulta de los datos generales Descripción La asignatura en el conjunto del plan de estudios Campos profesionales en que se proyecta Conocimientos previos Objetivos y competencias Contenidos Consulta de los recursos de aprendizaje de la UOC para la asignatura Información adicional sobre la bibliografía y fuentes de información Metodología Información sobre la evaluación en la UOC Consulta del modelo de evaluación Evaluación Contínua Evaluación final Feedback | ||||||
Este es el plan docente de la asignatura para el primer semestre del curso 2024-2025. Podéis consultar si la asignatura se ofrece este semestre en el espacio del campus Más UOC / La universidad / Planes de estudios). Una vez empiece la docencia, tenéis que consultarlo en el aula. El plan docente puede estar sujeto a cambios. | ||||||
La reputación de una marca o de una organización es un intangible. En consecuencia, a diferencia de lo que ocurre con la masa-energía, no sólo se transforma sino que también se crea y se destruye. A lo que precede a su destrucción lo llamamos crisis.
A lo que hacemos para evitar la destrucción de una reputación lo denominamos gestión de la comunicación de crisis. Si nuestras acciones se encaminan a evitar que la crisis estalle, hablamos de prevención. Si nos preparamos para afrontarla cuando llegue, eso es previsión. Y si tras sufrirla nos esforzamos para volver a la normalidad, la palabra clave es recuperación.
La mayoría de las organizaciones empiezan a gestionar la crisis cuando les estalla entre las manos. En el mejor de los casos, eso les sirve para impulsar a posteriori estrategias de prevención y previsión. Algunas, lamentablemente, consideran que una crisis superada actúa como una vacuna contra futuras crisis, lo cual las condena a tropezar reiteradamente con la misma piedra.
Lo cierto es que, si bien las cuatro facetas son esenciales y ninguna debería ser descuidada jamás, el orden lógico para abordarlas es, sin duda, éste:
1) Prevención
2) Previsión
3) Gestión
4) Recuperación
No en vano, se corresponden también con las cuatro fases que componen el proceso de las relaciones públicas: investigación, planificación, ejecución/comunicación y evaluación.
La prevención de crisis, en efecto, conlleva un exhaustivo proceso de investigación (denominado a veces auditoría de riesgos) para determinar qué probabilidades existen de que nuestra organización se vea envuelta en alguna de las situaciones que podemos considerar de crisis. La previsión, por su parte, comporta una planificación cuidadosa de todo lo que deberemos hacer para afrontar una crisis cuando se produzca. La gestión de una crisis, a su vez, desde la perspectiva de las relaciones públicas, comporta la ejecución de aquellas acciones comunicativas que pueden ayudarnos a superar la crisis o a minimizar sus efectos. Y la recuperación de una crisis implica, sobre todo, la capacidad de analizar las causas que la han provocado y de evaluar el modo en que ha sido gestionada.
Las conclusiones extraídas de esta evaluación deberían servirnos para evitar crisis futuras. Así, tal como ocurre con el proceso genérico de las relaciones públicas, la evaluación postcrisis reinicia el ciclo remitiéndonos a la investigación preventiva.
Con todo, conviene tener en cuenta que, aun siendo una herramienta extraordinariamente poderosa, normalmente no basta con la comunicación para superar una situación de crisis. Pensad que la reputación no suele caer en solitario: o bien se resiente a causa del deterioro de factores tangibles o bien lo tangible empezará a ir mal a causa del deterioro de la reputación. Casi siempre será necesario, por tanto, trabajar desde perspectivas multidisciplinares, lo cual no quita que los profesionales de la comunicación y las relaciones públicas tengamos un papel crucial a la hora de garantizar que todas esas perspectivas sean atendidas, entendidas y consideradas.
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Comunicación de crisis y RSC es una asignatura optativa del grado de Comunicación que intensifica algunas de las competencias genéricas requeridas para el ejercicio profesional de las relaciones públicas orientándolas específicamente a la prevención, previsión, gestión y recuperación de crisis desde una perspectiva esencialmente (pero no exclusivamente) comunicativa. También es parte esencial de la mención de Comunicación corporativa y relaciones públicas, una de las seis menciones que se proponen al alumnado en la recta final del grado. |
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En un entorno de alto riesgo como el actual, todo profesional de la comunicación debe estar preparado para hacer frente a situaciones de crisis. Esta asignatura aporta los conocimientos, las habilidades y las actitudes requeridos para ello. |
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Dado que la comunicación de crisis constituye una subárea en el campo de las relaciones públicas, es muy recomendable haber cursado previamente las asignaturas obligatorias Introducción a las relaciones públicas, Técnicas de relaciones públicas y Sistemas y procesos de las relaciones públicas. |
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Los resultados de Aprendizaje son:
Las Competencias son:
Objetivos del primer módulo (Prevenir la crisis):
Objetivos del segundo módulo (Prever la crisis):
Objetivos del tercer módulo (Gestionar la comunicación de crisis):
Objetivos del cuarto módulo (Recuperarse de una crisis):
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Módulo didáctico 1: Prevenir la crisis
1. Concepto
2. Gestión de riesgos
3. Responsabilidad social corporativa
Módulo didáctico 2: Prever la crisis
1. Manual de crisis
2. Alianzas y contingencias
3. Formación y simulación
Módulo didáctico 3: Gestionar la comunicación de crisis
1. Comité de crisis
2. Portavoces
3. Dilemas comunicativos
Módulo didáctico 4: Recuperarse de una crisis
1. Oxímoron perverso
2. Confianza y reputación
3. Círculo virtuoso
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Bibliografía básica
Bibliografía complementaria
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La metodología de aprendizaje de esta asignatura se adapta a los requerimientos de la propia materia y a los principios genéricos del learning by doing. Se recomienda encarecidamente el seguimiento de la evaluación continua, que no sólo garantiza la adquisición de conocimientos sino también el desarrollo de habilidades y actitudes esenciales. |
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El proceso de evaluación se fundamenta en el trabajo personal de cada estudiante y presupone la autenticidad de la autoría y la originalidad de los ejercicios realizados. La falta de autenticidad en la autoría o de originalidad de las pruebas de evaluación; la copia o el plagio; el intento fraudulento de obtener un resultado académico mejor; la colaboración, el encubrimiento o el favorecimiento de la copia, o la utilización de material o dispositivos no autorizados durante la evaluación, entre otras, son conductas irregulares que pueden tener consecuencias académicas y disciplinarias graves. Por un lado, si se detecta alguna de estas conductas irregulares, puede comportar el suspenso (D/0) en las actividades evaluables que se definan en el plan docente - incluidas las pruebas finales - o en la calificación final de la asignatura, ya sea porque se han utilizado materiales o dispositivos no autorizados durante las pruebas, como redes sociales o buscadores de información en internet, porque se han copiado fragmentos de texto de una fuente externa (internet, apuntes, libros, artículos, trabajos o pruebas del resto de estudiantes, etc.) sin la correspondiente citación, o porque se ha practicado cualquier otra conducta irregular. Por el otro, y de acuerdo con las normativas académicas, las conductas irregulares en la evaluación, además de comportar el suspenso de la asignatura, pueden dar lugar a la incoación de un procedimiento disciplinario y a la aplicación, si procede, de la sanción que corresponda. La UOC se reserva la potestad de solicitar al estudiante que se identifique o que acredite la autoría de su trabajo a lo largo de todo el proceso de evaluación por los medios que establezca la universidad (síncronos o asíncronos). A estos efectos, la UOC puede exigir al estudiante el uso de un micrófono, una cámara u otras herramientas durante la evaluación y que este se asegure de que funcionan correctamente. La verificación de los conocimientos para garantizar la autoría de la prueba no implicará en ningún caso una segunda evaluación. |
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Ponderación de las calificaciones
Opción siguiendo y superando la EC: EC
Nota final de asignatura: EC
Opción con EX: EX + EC
Nota final de asignatura: EX + EC EX = 65 % EC = 35 % Notas mínimas: · EX = 4 Esta fórmula de ponderación sólo se aplicará cuando la nota resultante mejore la obtenida en el EX. Cuando la nota obtenida en el EX sea inferior a 4 o la calificación resultante de la fórmula de ponderación no permita mejorar la nota obtenida en el EX, la calificación final de la asignatura será la nota obtenida en el EX. En el caso de asignaturas con prácticas (Pr) que cruzan con el examen (EX), la fórmula de ponderación sólo se aplicará cuando la nota resultante mejore la obtenida en FE (FE=EX+Pr). Cuando la nota obtenida en el EX sea inferior a 4, la calificación resultante de la asignatura será la nota obtenida en el EX. Cuando la calificación resultante de la fórmula de ponderación no permita mejorar la nota obtenida en FE, la calificación final de la asignatura será la nota obtenida en FE. |
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Para poder superar la EC se deben entregar todos las Retos dentro del plazo determinado. Con un Reto suspendido se puede superar la asignatura siempre que la ponderación lo permita. |
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La Matrícula de Honor Se podrá otorgar al alumno que haya obtenido una calificación final igual o superior a 9.0 y que haya destacado por mantener unos resultados excelentes en todos los Retos. Hay que tener en cuenta que el número de Matriculas de Honor asignadas no podrá exceder del cinco por ciento de los estudiantes matriculados en la asignatura en cada curso académico y que su obtención es, por supuesto, competitiva. |
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Los participantes recibirán un feedback relativo a su desempeño en el momento en que se hagan públicas las calificaciones de cada Reto. |