Obtención de ingresos

El hermano pobre de la comunicación digital

El periodismo digital no ha sido uno de los sectores más poderosos a la hora de tirar del carro de la comunicación en la Red, pero ha estado presente desde sus primeras fases. Aunque hay que reconocer que la profesión periodística en general pecó en restar importancia a Internet como medio de comunicación, lo cierto es que hay tempranas iniciativas de periodismo en los medios electrónicos.

Desde que la revista valenciana El Temps publicara su versión digital en 1994 han sucedido bastantes cosas. Otros medios de comunicación convencional han aterrizado en el medio digital con iniciativas empresariales y muchas más iniciativas de tipo periodístico han sido llevadas a cabo por individuos o equipos que en muchos casos no tenían formación ni conciencia de periodistas. Internet también ha sido una vía de experimentación de periodistas que han visto la Red como una alternativa al panorama laboral en los medios de comunicación convencionales.

Aun así, hoy en día no es sencillo obtener ingresos trabajando como periodista digital. Y el problema no radica tanto en la calidad de los servicios que un periodista o una redacción digital ofrecen, sino que hay ciertos condicionantes estructurales que dificultan la rentabilidad de esta actividad.

Ha surgido una innumerable cantidad de empresas de producción de contenidos digitales no periodísticos (productoras multimedia) que han encontrado un terreno fértil para la actividad empresarial. Y entre los medios convencionales el surgimiento de un nuevo tema de interés social, Internet y las nuevas tecnologías, ha provocado la apertura de revistas especializadas, el estreno de secciones de estas temáticas en los grandes medios y, en definitiva, una demanda de periodistas conocedores del medio digital.

El resultado ha sido que el periodismo digital en estado puro ha sido más un deseo o un proyecto de muchos periodistas que una realidad concreta. La mayoría de profesionales que se han aproximado al estudio o el ejercicio del periodismo digital lo han hecho con un pie puesto en otras actividades profesionales más rentables, lo que ha generado una debilidad infraestructural notable en este sector.

La situación ha ido evolucionando, la cifra de ingresos directos obtenidos en actividades periodísticas en la Red se ha incrementado, aunque es cierto que no tenemos estudios que lo puedan aseverar. Pero lo que se ha constatado en fechas recientes es que el volumen de ingresos indirectos o de beneficios intangibles que se ha derivado de la actividad periodística digital se ha incrementado, cosa que está provocando que cada vez sean más los profesionales que deciden poner su primer pie en la Red, mientras que los que ya tenían un pie están colocando el segundo y están consolidando sus proyectos.

Demos un repaso al panorama del periodismo digital sustentado por partidas presupuestarias y cobros en metálico:

 

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  • Periodistas digitales en medios periodísticos convencionales.
    Los grandes medios de comunicación convencionales han ido incrementando su actividad en la Red. Sus presupuestos dedicados a este tema han ido evolucionando a la hora de buscar destinatarios. Primero se dedicaron partidas a la programación de aplicaciones informáticas que transportasen a la Red contenidos generados por la redacción para el soporte tradicional. Se invirtió en informática pensando que así no sería necesario invertir en recursos humanos. Luego vino la fase de diseño y promoción de las versiones digitales. Se comprobó que no era suficiente con "estar" en la Red, sino que en el nuevo medio existía una competencia tan feroz por las audiencias como en los otros canales.
  • Periodistas digitales en publicaciones digitales independientes.
    Sobre el papel, Internet es el medio idóneo para plantear un proyecto de periodismo digital con una redacción adaptada al medio y millones de posibles usuarios/interactores a su alrededor. La práctica aun está lejos de esta percepción, aunque invertir en un proyecto así es cada vez menos arriesgado por diversos motivos:

 

Contenido complementario
  1. El sector de la publicidad online se está adecuando a los nuevos tiempos. Casi se podría decir que aun habiendo arrancado más tarde que los periodistas han alcanzado mayores cotas de confianza e implicación en el nuevo medio. El motivo no es una fe ciega en la Red, sino la constancia de que Internet mueve hoy en día una creciente cantidad de dinero en recursos publicitarios y que las expectativas inmediatas de crecimiento con la convergencia de Internet con la telefonía móvil y la televisión son espectaculares.
Hoy en día sigue siendo complicado que una publicación digital se sustente con la publicidad, pero obtener ingresos publicitarios es mucho más sencillo que hace tan solo dos años.
  1. La obtención directa de ingresos mediante suscripción o micropagos sigue sin ser un planteamiento factible, con contadas y meritorias excepciones. Pero las nuevas cabeceras que han trabajado mucho y bien en esta dirección han obtenido un prestigio profesional, y muchos de sus impulsores están obteniendo beneficios o compensaciones indirectas a través de servicios de información personalizados (consultores, asesores, freelances para medios convencionales).
Para muchos periodistas lo que cuenta es llegar a final de mes y satisfechos con el trabajo realizado. En ocasiones esto se consigue por esta vía.
  1. La penetración en el negocio de la publicación de contenidos de empresas potentes sin contenidos, como las operadoras de cable o las empresas informáticas, está generando también serias perspectivas de rentabilidad en base a la venta de una publicación a estas empresas o a la llegada de acuerdos de colaboración. Otras iniciativas periodísticas han sido llevadas a cabo de buen principio con un presupuesto aportado por estas empresas. Son iniciativas que pueden ser consideradas de abertura y posicionamiento en un nuevo mercado, o valoradas como servicios de valor añadido para sus clientes, o de difusión y prestigio de una marca. En todo caso, son proyectos editoriales que no esperan la obtención inmediata de ingresos, que cuentan con un presupuesto que puede ser absorbido en el marco de una batalla comercial de muchos millones.
  • Periodistas digitales en organizaciones públicas y privadas
    Un fenómeno general del mundo de la comunicación y que tiene su reflejo en el medio digital son las publicaciones de tipo corporativo, ya sean impulsadas por instituciones públicas o privadas. Los gabinetes de prensa han ido ganando peso y presencia en los últimos años, y la composición periodística de estos equipos es alta. Además la propia existencia de estos gabinetes ha hecho evolucionar la naturaleza de muchas publicaciones corporativas -digitales o no- desplazando la propaganda abierta y el autobombo para dar paso a un servicio de información facilitado por la propia fuente que genera esta información.
    Si en un panorama de medios convencionales las organizaciones públicas o privadas tenían como únicos interlocutores a los medios de comunicación y a los clientes (o socios) directos, en la Red un colegio profesional, una asociación empresarial, una universidad o un organismo público pueden plantearse la creación de su propio medio de comunicación, a cargo de sus presupuestos. Y esto comporta contratación de periodistas digitales.
  • Periodistas digitales en la formación y la investigación
    Los centros de formación e investigación también han respondido tarde al fenómeno comunicativo de Internet, pero están reaccionando.
    Se están llevando a cabo iniciativas relacionadas con la formación y la investigación en el campo del periodismo digital y esto conlleva la obtención de trabajo e ingresos para periodistas digitales y académicos especializados. No hay mejor muestra de ello que el posgrado que estamos compartiendo en estos momentos.
    La formación de profesionales y la investigación del medio no sólo comporta un incremento a corto plazo de la actividad económica relacionada con el periodismo digital, sino que asienta las bases a medio plazo de un sector profesional más sólido y competitivo.
  • Periodistas digitales en empresas de producción multimedia
    Finalmente, otra fuente de recursos -en algunos casos fundamental- ha sido el aprovechamiento de las habilidades personales del periodista para redactar contenidos en productos multimedia, componer guiones, plantear estrategias de comunicación en el medio digital y/o gestionar proyectos de comunicación digital. En otros casos se ha reciclado la misma estructura capaz de producir una publicación digital para la producción de contenidos o de proyectos digitales de tipo comercial.
    O, para ser fieles a lo acontecido en los últimos años, el proceso ha sido el inverso: periodistas implicados en empresas de producción de contenidos multimedia han reciclado sus habilidades para llevar a cabo iniciativas de periodismo digital, como quien dice fuera del horario laboral.
  • Las pocas que han sobrevivido están empezando a recoger frutos.