Tampoco es suficiente con tener muchas
visitas, tener identificadas algunas de sus necesidades y satisfacerlas con nuestros
contenidos y la publicidad si estamos tocando, por ejemplo, una franja de necesidades que
está muy explotada.
- Si queremos obtener ingresos de publicidad deberemos contemplar como competencia no
sólo a otras publicaciones digitales similares a la nuestra, sino a todo emisor que sea
capaz de convocar a su alrededor unos "grupos de necesidades" similares al
nuestro.
Dicho de otra manera, es erróneo pensar que después de llegar a un acuerdo con un
anunciante o una agencia se han acabado las tareas de marketing y publicidad de la
publicación. Al contrario, acaban de empezar. Nuestra propia publicación es un producto
que debe satisfacer las necesidades de unos sujetos. Localizar estos grupos de necesidades
y saber cómo satisfacerlas es una tarea que todo medio -digital o no- debe realizar. Pero
en el caso de las publicaciones digitales este trabajo adquiere una especial relevancia,
puesto que nuestra competencia no son las otras revistas del quiosco o las otras emisoras
del dial, sino que nuestra competencia se encuentra por doquier...; pero, a cambio,
nosotros también somos una competencia directa para estas publicaciones que trabajan por
doquier. Y si trabajamos bien podemos acaparar la atención de sujetos por doquier. Son
los inconvenientes y las ventajas de trabajar en un medio como la Red.
Los formatos de la publicidad online
Una publicación digital debe tener en cuenta cuatro posibles formatos publicitarios:
- El banner. El más popular en la actualidad. Mueve mucha actividad comercial a
su alrededor y aunque la mayoría de especialistas coincide que no es el formato idóneo,
tampoco hay opciones alternativas claras de substitución. A pesar de que no hace mucho
tiempo fue casi sentenciado a muerte, la salud del banner es buena.
Las críticas giraban entorno al bajo porcentaje de usuarios que clicaban los banners.
Posteriormente se ha podido comprobar que el banner, como formato, no era el único
responsable de esta baja respuesta. La entrada de creativos publicitarios, la
organización de campañas, la búsqueda de público adecuado y la mejora en la calidad
del diseño -en definitiva, la llegada de la publicidad profesional- ha mejorado
ostensiblemente sus resultados. En la actualidad, y dependiendo de los segmentos de
consumo, el banner es un soporte con unos índices de efectividad en relación al
coste similares a los soportes tradicionales. Además, se está produciendo una nueva
generación de banners mucho más interactivos que se desplegan, proponen juegos in situ y
permiten comprar directamente.
- El patrocinio. Esta modalidad publicitaria se caracteriza por el establecimiento de una
relación más cualitativa que cuantitativa entre una empresa y el medio.
Una marca paga un importe a cambio de figurar como patrocinador o empresa colaboradora
de una publicación, una sección, etc. Generalmente se pactan acuerdos por un plazo
semestral o anual y se pactan unos importes fijos, no dependientes del tráfico que genere
la web. Naturalmente, factores como el tráfico o la calidad del feedback obtenido pueden
influenciar a la hora de renovar, o no, el contrato de patrocinio.
- Anuncios en el correo electrónico. Las publicaciones que cuenten con un boletín
distribuido por correo electrónico pueden obtener ingresos incorporando publicidad en los
mensajes enviados.
Estos espacios son valorados por los anunciantes, ya que es información publicitaria
que llega hasta el buzón de los lectores de la publicación. Pero es necesario ir con
cuidado y no abusar de la confianza que han depositado en la publicación los suscriptores
de un boletín. Un volumen abusivo de publicidad o un tipo de anuncios no relacionados con
la temática de la publicación pueden generar efectos contraproducentes.
- Anuncios clasificados. Los clasificados son una fuente de ingresos tradicional en los
medios impresos. Su aplicación en la Red es factible y, es más, se prevé que sea una
fuente inmediata de negocio.
Ahora bien, hay diversas iniciativas empresariales que están trabajando precisamente
en los anuncios clasificados... sin la necesidad de que haya una publicación informativa
que los acoja. Una vez más, será el tipo de información que ofrezcamos y el tipo de
lectores que tengamos lo que nos permitirá plantearnos o no un servicio como éste.