Cómo hablar por ordenador. Técnicas de comunicación telemática

La comunicación en la red cambia cuantitativamente y cualitativamente, ya sea en actividades en que la comunicación es persona a persona -estudiante-consultor- o en actividades abiertas como la participación en los debates, fórums etc.
 

Propuestas para redactar mensajes y enviarlos

a) Poned en el encabezamiento el tema del mensaje. Procurad que el tema responda lo más rigurosamente posible al contenido del mensaje. Para poder priorizar la información y agruparla adecuadamente este aspecto es muy importante, porque el receptor podría utilizar los mensajes más eficazmente. Si respondéis al mensaje, repetid el mismo encabezamiento para que el receptor se sitúe más fácilmente.

b) Sed concisos en los mensajes. A veces quien los recibe tiene que leer muchos diariamente. No utilicéis mayúsculas, salvo que queráis destacar algo importante.

c) Especificad los puntos que queréis tratar y, si es necesario, numeradlos. De esta manera, la persona que responde lo hará de acuerdo con estos puntos. Si contestáis un mensaje, a veces conviene citar textualmente los párrafos del emisor al que queréis contestar.

d) Si no recibís respuesta en un tiempo prudencial, volved a enviar el mensaje. Puede pasar que el receptor del mensaje lo haya perdido por circunstancias fortuitas y no lo pueda contestar.

e) Sed prudentes con el lenguaje, los chistes, los sarcasmos, etc., ya que en la comunicación no presencial esta clase de mensajes se pueden malinterpretar.

f) Firmad siempre los mensajes. Es una cortesía para quien los recibe, facilita la respuesta e indica que el mensaje ha finalizado. En este punto, recordad que el buzón permite poner una firma automática a los mensajes enviados -desde la opción Preferencias-.

El estilo de las comunicaciones

A la hora de enviar mensajes, puede haber casos de conocimiento personal y casos de conocimiento más general, ya que el tutor conoce uno a uno a sus estudiantes desde el día de la matriculación y el consultor consigue un conocimiento global mediante los encuentros presenciales. Además, tanto el consultor como el tutor tienen una ficha del estudiante, que pueden ampliar si éste ha rellenado la opción Currículum. Esta fuente de información será básica para optar por un tipo de tratamiento u otro. Por lo que se refiere al estilo de las comunicaciones, se recomienda:

• utilizar un lenguaje claro y conciso con frases preferentemente cortas;
• intentar que las comunicaciones sean amenas, pero sin caer en el infantilismo;
• evitar frases de tono negativo, que podrían desanimar a los alumnos. Por ej.: no has alcanzado el nivel, no lo has entendido veo que te has esforzado mucho, pero no...”

• Empezar la comunicación con un saludo -que incluya el nombre del estudiante. Por ej., “Hola, José,...”.
• Continuar con alguna frase al margen del tema, que indique que hay un interés personal por el estudiante -por ejemplo: interesarse sobre cómo le van las cosas, referirse a alguna cuestión que hubiese comentado el estudiante en una ocasión anterior, aprovechar algún aspecto de su currículum, etc.-.
• Introducir el tema o el motivo de la comunicación con alguna frase de connexión, como: “Sobre lo que me preguntas”, “A propósito de tu consulta”. Y en caso de proponer trabajos: “Sería interesante que”, “He pensado que podrías”, “¿Qué te parece si ahora...?”

Recuerda. . .
 

Es tan importante la intención con que se escribe como la intención con que se lee. Cuidado con el lenguaje.