El enfoque de autoevaluación mediante reunión de trabajo ofrece la gran ventaja de requerir la implicación activa de la Dirección de la empresa; por lo que es necesario que el equipo directivo haya recibido una sólida formación en el Modelo Europeo, incluyendo el estudio y evaluación de un caso práctico.

Al finalizar la formación, se asignarán los diferentes subcriterios a cada uno de los miembros del Equipo de Dirección, que serán los responsables de recopilar toda la información relevante relativa a dicho subcriterio.

Una vez recogida toda la información, se celebrará una reunión de trabajo, de una duración aproximada de un día o día y medio, en la cual se pondrán en común los hallazgos de cada uno de los miembros del Equipo de Dirección en los respectivos subcriterios.

Aunque el Equipo de Dirección haya recibido formación en el Modelo Europeo y la metodología de puntuación, será conveniente contar con el apoyo de dos facilitadores plenamente formados que les asistan en las etapas de puntuación y consenso. Es recomendable que uno de los facilitadores sea externo a la empresa o unidad de negocio que está siendo evaluada.

En una etapa posterior se acuerdan los planes de mejora, los cuales deberán ser revisados periódicamente. Normalmente, cada directivo se convertirá en propietario de ciertas áreas de mejora relacionadas más directamente con sus responsabilidades, y preparará una propuesta de planes de mejora que serán presentados en una reunión posterior dedicada a la planificación de acciones.

Beneficios de este enfoque

• Es una excelente forma de lograr que la Dirección comprenda y se comprometa con el Modelo de la EFQM.
• El hecho de que la Dirección debata y acuerde los puntos fuertes y las áreas de mejora ayuda a construir una visión común de toda la organización.
• La Dirección se convierte en propietaria de los resultados, facilita el subsiguiente establecimiento de prioridades y acuerda los planes de acción. De esta manera, la Dirección potencia e impulsa el establecimiento de todas las acciones de mejora acordadas.
• Ofrece a la Dirección la oportunidad de crear espíritu de equipo y, por consiguiente, lo transmitirá al resto de la organización.
• Permite acordar una relación de puntos fuertes y áreas de mejora que impulsará las actividades de mejora.

Riesgos de este enfoque

• Se trata de un proceso menos firme y preciso que el enfoque de simulación de presentación al premio, ya que depende mucho de la formación adquirida por la Dirección y de los datos recogidos.
• Puede entrañar un riesgo muy alto y exige una preparación y labor de facilitación excelentes.
• Puede resultar difícil evaluar la evidencia de implantación de algunos procesos de la organización.
• Cabe la posibilidad de obtener una puntuación que no se corresponda con la realidad.