Los activos de la organización |
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Ahora ya no basta con una gestión eficaz de los recursos financieros, humanos y tecnológicos, sino que se hace necesario gestionar aquellos recursos inmateriales o intangibles que la organización posee. Además de los activos de mercado, los de propiedad intelectual, los de infraestructura, es necesario gestionar otros activos que aportan un valor único como son los activos de información y conocimiento. |
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Consecuencia de lo anterior es que las organizaciones ya no se diferencian y valoran tanto por su capital financiero sino por el conjunto de recursos y capacidades que las componen. | ||
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Ejemplo de ello podemos encontrarlo en el valor que alcanzan en la bolsa organizaciones cuyos activos tangibles no se valoran ni en la mitad de lo que lo hacen sus acciones. | |
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La diferencia entre el valor de mercado y el valor contable de una organización se basa en que la primera integra el capital intelectual y la segunda no. | |
Aunque todavía aún hay discrepancias en cómo medir el verdadero valor de una organización, existe un acuerdo mayoritario a la hora de establecer dos conjuntos de activos (tangibles e intangibles) como los componentes esenciales para la generación de valor en la organización, aunque con naturaleza netamente diferenciada. | ||
Durante los últimos años, diversos autores han ofrecido distintas clasificaciones de los recursos que posee una empresa. Grant (1991) distingue entre dos tipos de recursos: recursos tangibles y recursos intangibles. | |