Cerca de la década de 1960, las computadoras seguían evolucionando, se reducía su tamaño y crecía su capacidad de procesamiento. También en esta época se empezó a definir la forma de comunicarse con las computadoras, la cual recibía el nombre de programación de sistemas. Las características de la segunda generación son las siguientes:
Algunas de estas computadoras se programaban con cintas perforadas y otras, por medio de cableado en un tablero. Los programas se hacían a la medida por parte de un equipo de expertos: analistas, diseñadores, programadores y operadores que se manejaban como una orquesta para resolver los problemas y cálculos solicitados por la administración. El usuario final de la información no tenía contacto directo con las computadoras. Esta situación se produjo en un principio en las primeras computadoras personales, pues se requería saberlas programar (alimentarlas de instrucciones) para obtener resultados; por lo tanto, su uso estaba limitado a aquellos audaces pioneros que gustaran de pasar un buen número de horas escribiendo instrucciones, ejecutando el programa resultante y verificando y corrigiendo los errores o bugs (en el argot informático, se considera que un bug es un error en un programa ya comercializado) que aparecieran. | |||||||||||||||
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Para no perder el programa resultante, había que guardarlo (almacenarlo) en una grabadora de casete, pues en esa época no había discos flexibles, ni mucho menos discos duros para los PC. Este procedimiento podía llevar de diez a cuarenta y cinco minutos, según el programa. El panorama se modificó totalmente con la aparición de las computadoras personales con mejores circuitos, más memoria, unidades de disco flexible y, sobre todo, con la aparición de programas de aplicación general en los que el usuario compra el programa y se pone a trabajar. Aparecen los programas procesadores de palabras como el célebre Word Star, la impresionante hoja de cálculo (spreadsheet) Visicalc y otros más que, de la noche a la mañana, cambiaron la imagen del PC. El software empieza a tratar de alcanzar el paso del hardware. Pero aquí aparece un nuevo elemento: el usuario. | ||||||||||||||
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El usuario, a medida que se populariza la informática, conseguirá que el hardware y el software se diseñen y construyan no sólo bajo criterios de eficiencia y productividad, sino también teniendo muy en cuenta al propio usuario, de modo que se fabricará hardware cada vez más ergonómico y programas de uso intuitivo (friendly user interface). |
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