El objetivo de esta fase es determinar los objetivos que hay que alcanzar con la implementación del plan de la categoría.
Estos objetivos se hallan en función de la evaluación realizada de la categoría en la fase anterior y del rol que se haya establecido para ella.
Así, los objetivos para una categoría de destino deben resultar coherentes con las características de este tipo de categoría. Por ejemplo, un crecimiento de la rotación o de la cuota de mercado. Para una categoría de conveniencia, se podrían determinar medidas de rendimiento en función de los márgenes y, en cambio, no resultaría coherente si se fijasen en función de las rotaciones, ya que el incremento de rotación no conforma la finalidad de estas categorías.
Para concluir, hay que mencionar que estas medidas de rendimiento, que pueden ser tanto internas como externas, deben permitir controlar la situación de la implementación del plan de la categoría, para incluir modificaciones si resultan necesarias.