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Software

Se entiende por software el conjunto de programas (o instrucciones) que el procesador del ordenador va ejecutando secuencialmente y que permiten, básicamente, controlar el hardware. En realidad, la funcionalidad que aporta el software en un sistema informático se sitúa en todos los niveles, desde el más básico, consistente en hacer funcionar el hardware, hasta el nivel del usuario.

En el nivel más básico, el software controla las diferentes unidades del procesador, la memoria y los periféricos y todas las señales eléctricas que permiten conectarlo entre sí.

En el nivel más alto, tiene la función de presentar al usuario una interfaz que le facilite su interacción con el ordenador. Esta interfaz tiene que diseñarse de manera que permita a la persona trabajar con objetos de alto nivel y que tengan alguna relación con su mundo real. De esta manera, no necesita estar pendiente de los numerosos detalles técnicos necesarios para que el hardware funcione. Es el software el que enlaza ambos niveles. Esta capacidad de permitir abstraer al usuario de los detalles del hardware es fundamental para poder trabajar con eficiencia con un sistema informático.

Entre ambos niveles hay varias piezas de software organizadas en capas de manera que cada una añade un nivel más de abstracción entre el hardware y el nivel del usuario. Puede apreciarse una división entre el software que realiza las funciones más genéricas y básicas del sistema, llamado de infraestructura básica y el software de aplicaciones, que se centra en la resolución de las necesidades concretas de los usuarios.

Software de infraestructura básica

Es el que realiza las funciones más básicas de un sistema de información, que cuentan no sólo el control del hardware, sino de todos aquellos subsistemas que forman una base sobre la cual las aplicaciones de usuario puedan funcionar. Básicamente, es lo que se conoce como sistema operativo, pero también incluye otras piezas utilizadas por la mayoría de las aplicaciones como, por ejemplo, el sistema de correo electrónico o el de acceso a bases de datos.

Toda organización necesita incluir muchos productos de software de infraestructura básica. Los riesgos de intentar desarrollar en la organización estos productos son muy grandes, ya que son tecnológicamente complejos y requerirían un grado de especialización elevado y, por lo tanto, el coste de desarrollo sería muy importante. Por esto, lo recomendado es adquirir productos de mercado. No sólo resulta más económico, sino que también las empresas fabricantes verifican su calidad, garantizan la compatibilidad con otros productos y son capaces de seguir el ritmo de evolución de la tecnología, ya que tienen todos sus recursos dedicados a esto.

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Software de aplicaciones

Al contrario que el software de infraestructura básica, el de aplicaciones necesita en su diseño y construcción conocer cómo es el usuario y su manera de actuar, de entender la organización y lo que espera obtener de los sistemas informáticos.

La utilización de paquetes comerciales para cubrir las necesidades del software de aplicaciones es recomendable, aunque no siempre es posible, ya que muchas características pueden ser específicas de la organización. En estos casos, la organización tiene que asumir el desarrollo del software específico.

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Sistema operativo

El sistema operativo comprende la capa más básica del software de infraestructura. Provee las funciones clásicas que permiten a las aplicaciones abstraerse de los detalles del hardware:

  • Control del procesador y de la memoria.

  • Ejecución de programas y control de procesos. El sistema operativo se encarga de crear y destruir procesos y de asignar recursos a cada uno de ellos, como por ejemplo el tiempo de proceso, la memoria y la compartición de los periféricos. Cuando hay varios procesos ejecutándose al mismo tiempo (multiproceso), el sistema operativo tiene que arbitrar una manera ordenada y equilibrada para que cada proceso acceda a los diferentes recursos en orden y sin excluir a los otros procesos.

  • Controladores de los periféricos. El sistema operativo tiene que generar las señales necesarias para controlar a los periféricos y ofrecer una manera de acceso adecuada para las aplicaciones.

  • Sistema de ficheros. Es la abstracción (en ficheros y directorios) que utilizan los sistemas operativos para organizar el espacio de almacenamiento de los discos y otros soportes de información y permitir un acceso adecuado por parte de las aplicaciones.

  • Control de usuarios. En sistemas que permiten un uso diferenciado para usuarios diferentes (multiusuario), es necesario establecer métodos para identificar a cada usuario y para permitir a cada uno realizar las operaciones y acceder a los recursos que tengan autorizados.

Últimamente, también se incluyen en el sistema operativo funciones de más alto nivel que se han convertido en estándares:

  • Controlador de las comunicaciones por red, correo electrónico y acceso a Internet.

  • Herramientas de administración. Los administradores del sistema son las personas encargadas de mantener y gestionar los recursos del sistema operativo. Las herramientas de administración facilitan su trabajo en temas como la gestión de los usuarios y recursos y la monitorización del rendimiento del sistema.

  • Compiladores y librerías dinámicas. Muchos sistemas ofrecen herramientas y métodos estándar para ayudar en la programación de aplicaciones.

  • Control de la interfaz gráfica. La gestión de todos los objetos (ventanas, menús, iconos, etc.) que aparecen en una pantalla es bastante compleja, así como su utilización por parte de las aplicaciones. Los sistemas que ofrecen una interfaz de uso para las aplicaciones también son una gran ayuda para los programadores.


Contingut complementari

Todos estos mecanismos proporcionan un nivel de funcionalidad que simplifica mucho el desarrollo de aplicaciones, ya que permite a los analistas y programadores concentrarse en lo que es esencial en la aplicación.

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Ofimática

Se entiende por software de ofimática un conjunto de herramientas pensadas para facilitar toda una serie de tareas administrativas habituales en oficinas: creación de documentos, esquemas gráficos, cálculos financieros y otros, archivos de datos, gestión de la agenda, etc. Las más importantes son los procesadores de textos, editores gráficos, hojas de cálculo y bases de datos. Una característica importante es que todas estas herramientas están diseñadas para trabajar en coordinación. Así, por ejemplo, utilizan menús y combinaciones de teclas iguales para las mismas funciones o permiten al usuario traspasar textos y gráficos de una a otra de una manera fácil y rápida. Por otra parte, la generalización de las redes ha impuesto otras herramientas como estándares dentro de las oficinas: el correo electrónico, que está desplazando al fax, y los navegadores de Internet.


El paquete de oficina más popular es el Microsoft Office.

Exemple

  • El procesador de textos es una herramienta que facilita la creación y edición de documentos. También se conoce como editor de textos. Permite la manipulación de documentos con textos y muchos ellos también admiten trabajar con varios tipos de gráficos. Según su sofisticación, tienen varios formatos para el texto: tipo y tamaño de letra, negrita, subrayado, colores, etc. Muchos disponen de herramientas y funciones auxiliares como correctores ortográficos, diseño de tablas o generadores automáticos de índices.

  • Las herramientas de diseño gráfico son herramientas especializadas en la creación de documentos con alto contenido gráfico, como pósters para exposiciones o transparencias y diapositivas para presentaciones. Los tipos de gráficos que incluyen van desde dibujos lineales a imágenes digitalizadas. Algunos de los más sencillos es Power Point, que pertenece al paquete de Microsoft Office. Otros más sofisticados son Corel Draw y Photoshop.

Existen herramientas de diseño gráfico muy especializadas en varios campos de la ingeniería que permiten diseñar componentes electrónicos, piezas mecánicas, edificios, etc. Disponen de numerosas funciones de manipulación de objetos gráficos de dos y tres dimensiones y también de generación de vistas o escenas 3 D. Una de las más utilizadas, sobre todo en arquitectura, es Autocad.

  • Las hojas de cálculo son programas que sirven para calcular y visualizar tablas de cifras. La zona de trabajo es una cuadrícula de filas y columnas que definen celdas donde se coloca la información. También permiten hacer gráficas de los datos. La característica que les da una gran potencia es incluir fórmulas basadas en los datos de las celdas y una función de recálculo automático de manera que, cuando se modifica un dato, todas las fórmulas que dependen del mismo se vuelven a calcular. Las hojas de cálculo más conocidas son Microsoft Excel y Lotus 1-2-3.

  • Las bases de datos son conjuntos ordenados de información. La información se organiza en tablas, y cada fila de las mismas se denomina registro y contiene varios campos. Las diferentes tablas que pueden formar la base de datos pueden relacionarse entre sí mediante un sistema de punteros e índices. Esto permite buscar información relacionada, pero repartida en varias tablas. Las bases de datos que utilizan este esquema de organización se denominan relacionales.

    Por extensión, también se conocen como bases de datos los programas que gestionan y permiten acceder a la información que se almacena, pero el nombre más exacto sería gestor de bases de datos.



Contingut complementari

Existen gestores de bases de datos de distinta complejidad. Los más sencillos tienen una capacidad reducida (pero suficiente para muchas aplicaciones de oficina), como por ejemplo Microsoft Access. Las más completas gestionan grandes volúmenes de datos con eficiencia, rápido acceso e implementan mecanismos de integridad de los datos frente a accesos simultáneos de varios usuarios y sistemas de seguridad contra la pérdida de información. Quizá una de las más conocidas es Oráculo.

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