|
3. Rutinas con respecto
al medio
- Más que un redactor
La Red es un canal multimedia, por lo que los periodistas digitales deben concebir su
trabajo desde una perspectiva multimedia, atendiendo a elementos como el diseño del
interfaz, la estructura de contenidos, la integración de textos, imágenes, sonido, bases
de datos, programas, etc. En la práctica, esto conlleva un trabajo en equipo y en red
mucho más integrado del que han conseguido los medios convencionales en sus redacciones y
estudios, donde es habitual que profesionales muy diversos trabajen codo a codo, pero en
un proceso en cadena, compartimentado.
- Editar es publicar
La Red es un medio de publicación instantánea, lo que altera las rutinas a que están
acostumbrados los medios periódicos o con parrillas horarias. Y no sólo es instantánea
a la hora de publicar, sino también a la hora de cobrar, lo que condiciona también la
perspectiva de negocio del periodismo en una vertiente digital.
- Certificar que tú eres tú
La Red requiere sistemas de certificación de identidad. No sólo será necesario que el
periodista digital certifique las fuentes, sino que también deberá certificar su propia
identidad ante su clientela. De nada sirve que un periodista digital compruebe que una web
ha sido producida por quien dice que lo ha hecho, si luego otra persona le suplanta ante
su audiencia.
- Gestión del caos
La Red tiene una componente de caos continuo, sin final previsto por el momento.
Precisamente este caos es una de las componentes más positivas de la Red, puesto que
permite unos grados de libertad de expresión desconocidos hasta la fecha. El periodista
digital integra en sus servicios la capacidad de gestionar este caos y de ofrecer sus
criterios de ordenación a personas que deleguen en él parte de su derecho de inmersión
en el caos informativo.
- Gestión de la interactividad
La Red es interactiva, y el periodista digital debe buena parte de su existencia a su
eficiencia ante esta nueva capacidad de la "audiencia", inviable en el
periodismo de masas.
- Gestión de la hipertextualidad
La Red es hipertextual y multilineal. El buen periodista digital también deberá sacar
provecho de estas estructuras de información para ofrecer unos contenidos
personalizables, flexibles, ampliables, actualizables, interactivos...
- Gestión de la memoria
La Red se caracteriza por disponer de una capacidad de memoria virtualmente sin límites.
El periodista digital debe trabajar a fondo esta capacidad, también desconocida en los
medios tradicionales, a la hora de contextualizar información, ofrecer backgrounds,
utilizar archivos y hacer público el acceso a bases de datos en estado puro. Ésta es la
vertiente documentalista del periodista digital, que no sólo ofrece un pescado en forma
de información de archivo, sino que enseña a su clientela a pescar en las bases de
datos.
- Gestión de la multiculturalidad
La Red es mundial, lo que comporta que las posibles audiencias son multiculturales y
multilingües. Cada medio digital opta por trabajar con una audiencia determinada, y
sería una lástima que un buen periodista digital trabajara bien todos los puntos
anteriores, pero viera limitada su posible clientela por una simple barrera lingüística.
Ciertamente, hay temáticas que están limitadas a un público monolingüe, pero muchas
otras, no.
|