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Promoción: la red virtual de ventas
La red virtual de ventas es un excelente
sistema de atracción de clientes potenciales. Consiste en poner
en pie una estructura de representantes que promocionarán nuestra
oferta a cambio de una comisión.
Son personas o empresas que tienen
sus propias páginas en Internet y que pueden estar interesadas,
para completar el servicio a sus clientes y, a la vez, para aumentar sus
ingresos, en vender nuestros productos. La función que desempeñan
para nosotros es la de promocionar nuestra oferta y conducir a los clientes
interesados hacia nuestras páginas.
Nosotros realizamos la venta (y cobramos
del cliente), enviamos el producto al comprador y pagamos la comisión
correspondiente al representante.
Ventajas
Para el agente,
asociado o representante
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Dispone inmediatamente de productos para
vender.
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No debe mantener ningún stock.
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No debe montar una tienda virtual.
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No se debe preocupar de la logística.
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Ni del cobro.
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Amplía la oferta a sus clientes.
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En muchos casos, dispone de contenidos
gratuitos para su sitio web.
Para el vendedor
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Dispone de una serie de sitios web que
se dedican a promocionar sus productos.
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Mantiene todo el control de las operaciones,
ya que es él quien tiene el producto y quien efectúa los
cobros a los clientes.
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Su coste comercial es completamente variable.
Es decir, sólo tiene costes comerciales si vende. Además,
únicamente paga las comisiones cuando ha cobrado de sus clientes.
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Ahorra mucho en gastos comerciales. Veámoslo
con un ejemplo imaginario pero bastante ajustado a la realidad actual:
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Coste de la red virtual de ventas:
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Comisión: 20%
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Precio del producto: 10.000
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Coste comercial de cada venta: 2.000 (Coste
variable, sólo tiene coste si vende)
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Coste de la publicidad con anuncios o
banners:
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6 pesetas por impacto.
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Si obtiene un clickthrough -bastante
excepcional- del 1%. Es decir, que 1 de cada 100 personas que ven la publicidad
hacen click y saltan a su página.
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Si el 5% de los que visitan la página
compran el producto.
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Coste comercial de cada venta: 12.000
(coste fijo, tanto si vende como si no vende, debe pagar la publicidad).
Podemos encontrar
varios modelos de remuneración:
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Pagamos una cantidad por cada cliente
potencial que nos aporta el promotor.
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Pagamos por cada cliente aportado que
da algún paso concreto, por ejemplo, rellenar un formulario.
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Pagamos una comisión por ventas.
Están entre el 5% y el 40% según los programas y el tipo de producto
del que se trate. Éste es el modelo más difundido porque
es el mejor compromiso entre resultados -
ventas realizadas-
y simplicidad de las herramientas de control.
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Pagamos por la venta y, además,
respetamos el cliente al promotor para ventas futuras. Este modelo
es el que desea el agente, pero es, probablemente, imposible de aplicar.
El ejemplo más conocido
es el de Amazon.com, que fue, además, el creador de la idea. Cualquier
sitio web puede presentar un banner de Amazon. El sitio puede, por
ejemplo, promocionar algún libro concreto y, si el visitante lo
quiere comprar, sólo necesita hacer clic sobre un enlace puesto
en la crónica del libro y salta automáticamente a la página
de Amazon referente al libro en cuestión.
Amazon nos pagará entre un 5%
y un 15% de cualquier libro que el visitante de nuestras páginas
compre en el día de hoy.
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