La sociedad del siglo XXI se caracteriza por su dinamismo y por su increíble poder
de adaptación a circunstancias cambiantes a causa de los movimientos económicos y
de mercados. Se trata de una sociedad mucho más variada, y también plural, con grandes
exigencias comunicativas. La interacción de culturas en un mercado globalizado, así
como la constante necesidad de mantener la entidad local, crea un marco socioeconómico
cultural en el cual la comunicación es clave.
Pero ¿cómo se puede crear un mensaje común que atraviese culturas, lenguas e ideologías?
Bien, éste será el gran reto que se debe alcanzar, pero se debe tener en cuenta que
el lenguaje visual se hace imprescindible en una sociedad que acoge una población
tan distinta y que se encuentra siempre en constante movimiento.
El lenguaje a través de símbolos y gráficos ha sido siempre un vehículo de comunicación.
Desde las cuevas con pinturas rupestres a las vidrieras de las iglesias, la historia
de la humanidad se ha servido del poder comunicativo de la imagen con el fin de llegar
a las masas. En la actualidad, podríamos decir que la publicidad, principalmente al
servicio de empresas e instituciones, ocupa un lugar crucial y domina el imaginario
que nos rodea de manera cotidiana, casi sin darnos cuenta.
Esta necesidad comunicativa inherente a la sociedad se amplifica por causa del extenso
abanico de soportes y medios que aparecen gracias a la revolución tecnológica en la
que vivimos. Nuevos medios de comunicación, nuevas formas de transmisión, más rápidas,
más fiables y más personalizables: el crecimiento no tiene freno.
Dentro de este contexto social y económico en el que vivimos se hace cada día más
necesario el conocimiento y dominio del lenguaje visual. El mercado necesita diariamente
un número mayor de diseñadores y creativos visuales, pero, al mismo tiempo, otros
profesionales que tengan un buen conocimiento de las herramientas comunicativas visuales
para poder integrarlas en sus actividades diarias, optimizando recursos y alcanzando
más éxitos.
La asignatura Diseño visual tiene como objetivo formar y guiar a aquellos estudiantes que quieran introducirse
en este lenguaje tan poderoso de la comunicación a través de las imágenes. Por ello
contiene un contenido muy variado que intenta cubrir todos los aspectos relativos
a la comunicación visual.
Con el primer módulo, "Introducción al grafismo", el estudiante se introducirá en los conceptos básicos del diseño y aprenderá los
elementos en los que se sustenta el alfabeto visual, los cuales serán de vital importancia
a lo largo del curso y, sobre todo, en el futuro uso del lenguaje visual.
En el módulo "Producción gráfica analógica y digital", el estudiante se adentrará en los aspectos más técnicos de la producción gráfica y estudiará las diferencias entre la comunicación digital y analógica, así como la
producción de elementos para cada una de ellas. Cómo se debe producir una imagen según
cuál sea su destino, diferenciar un mapa de bits de una imagen vectorial, o los formatos
de comprensión, son algunos de los aspectos que se trabajarán en esta sección del
material.
Después de haber adquirido el aprendizaje del alfabeto visual, en el módulo "Sintaxis de la imagen" el estudiante irá más allá en su estudio de la comunicación visual, y será capaz
ahora de estudiar la interacción entre los signos gráficos. Y en el módulo "Composición y expresión gráfica", el estudiante dispondrá ya de un amplio abanico de recursos para su expresión gráfica
y será capaz de crear mensajes con significación compleja.
El módulo "Diseño y producción" está destinado a conocer el proceso de producción de mensajes comunicativos visuales
en el ámbito profesional y aportará al estudiante un buen conocimiento de la metodología
de producción.
Con este recorrido, desde la significación del signo hasta la producción definitiva
de un mensaje visual, el estudiante alcanzará un conocimiento amplio y detallado de
la creación, el diseño y la producción del mensaje visual.